Entre narrativa cultural y visión empresarial, la firma venezolana demuestra que internacionalizarse es cuestión de estrategia, disciplina y plataformas correctas.
Magnolia by Daniela Peña ha marcado un hito en su historia reciente al presentarse en Los Cabos Fashion Week y Colombiamoda 2025 con su colección “Florece el Sur”. Un recorrido que no solo habla de estética y creatividad, sino de estrategia, dirección clara y un ecosistema multidisciplinario que ha llevado a la marca a un nuevo nivel en su proceso de internacionalización.
Una promesa cumplida seis años después
En 2019, Daniela Peña se hizo una promesa: trabajar con enfoque y disciplina para algún día presentar en una de las plataformas más importantes de la región, Colombiamoda. Seis años después, esa meta se cumplió, pero el camino para llegar ahí fue tanto de crecimiento creativo como de fortalecimiento estructural.
Durante este tiempo, Magnolia entendió que tener una dirección clara no es suficiente: la clave está en rodearse de un equipo multidisciplinario que pueda traducir una visión en un producto competitivo para mercados internacionales.
Dos plataformas, dos estrategias
El debut de “Florece el Sur” se dio primero en Los Cabos Fashion Week, un escenario emergente, pero estratégico para la marca. Allí, Magnolia apuntó directamente a un público final alineado con su propuesta —turistas internacionales, compradores con alto poder adquisitivo y amantes de la moda resort— logrando un contacto B2C fuerte, ventas inmediatas y reconocimiento directo de su consumidor ideal.
Pocos días después, la marca llegó a Colombiamoda 2025, una de las plataformas más importantes de la región para el negocio de la moda. Aquí, el objetivo fue otro: establecer contactos B2B con retailers, concept stores y boutiques internacionales interesadas en productos con narrativa y valor cultural. La participación puso a Magnolia en el radar de compradores clave, abriendo puertas que impulsarán su expansión fuera de Venezuela.
El equipo detrás de la colección
El éxito de “Florece el Sur” se debe a la visión creativa de Daniela Peña, pero también a un engranaje de talentos:
- Geraldinne Alarcón (Estilismo): cohesionó visualmente los 26 looks para que funcionaran en distintos contextos internacionales.
- Elizabetta Rosad (Buyer Advisor): adaptó la colección a estándares globales, afinando detalles para que conectara con audiencias en distintos países.
- Artesanos de Canaima: aportaron técnicas ancestrales en bordados y acabados que anclan la propuesta a su origen.
- Equipo de comunicación y producción: garantizó una narrativa sólida y una logística impecable para ambas presentaciones.
Estrategias para la internacionalización
- Segmentación de audiencias – Definir dónde encontrar a cada tipo de cliente (B2C en Los Cabos, B2B en Colombiamoda) optimiza inversión y resultados.
- Narrativa coherente y adaptable – Una historia potente de origen, pero contada en un lenguaje que pueda resonar globalmente.
- Optimización para mercados – Ajustes en tallaje, empaques y materiales para cumplir con expectativas y normativas internacionales.
- Plataformas estratégicas – Participar en ferias y fashion weeks que aporten tanto visibilidad como oportunidades comerciales concretas.
Lecciones para emprendedores de moda
Magnolia demuestra que internacionalizarse no es un salto improvisado, sino un plan de largo plazo. Identificar las plataformas correctas, construir un equipo con competencias diversas y mantener la disciplina para ejecutar un plan son pasos clave para pasar de lo local a lo global.
La historia de “Florece el Sur” nos recuerda que el talento creativo es el punto de partida, pero son la estrategia, el enfoque y la colaboración multidisciplinaria lo que permite a una marca convertirse en un actor competitivo en la industria internacional.
